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4 de septiembre de 2022

Embajadora de MiCuento

 Hoy os traigo un nuevo descubrimiento. 

Este verano recibí un email en el que me preguntaban si quería ser embajadora de MiCuento y ya sabéis que en esta casa somos amantes de los libros, así que no me lo pensé mucho. 
Como me gusta siempre que recomiendo algo, ser la primera en probarlo, antes de hacer esta recomendación pedí mi primer libro personalizado. Tenéis que entrar en la web y ver lo bonitos que son los cuentos y las iniciativas que envuelven a MiCuento.  Lo que más me costó fue decidir qué cuento personalizar porque me gustaron muchos y al final elegí éste. 

Portada del libro


Puedes añadir si quieres una imagen o una fotografía, yo elegí esta porque tiene mucho significado para nosotras. 

Rellenáis los datos que queráis que aparezcan en el cuento y... ¡queda personalizado! Ana se quedó muy sorprendida porque el cuento hablaba sobre ella y su ciudad. 

La contraportada del libro queda así. 
Los libros son de calidad, la cubierta del libro es suave y las páginas de papel resistente y satinado. Los dibujos, como podéis ver, son muy bonitos, con ilustraciones, en este caso, de Marina Martín. Podéis personalizar también al protagonista o la protagonista del cuento. 

¿Quieres tener un detalle personalizado con algún niño o niña? ¡Este le va a encantar! Además, si usáis el código 

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¿A qué esperas para pedir el tuyo? 

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26 de agosto de 2022

"Adiós expectativas, hola realidad. Mitos y verdades de la maternidad real" de Mónica de la Fuente

 

Portada del libro


No es un libro de maternidad. ¿O tal vez sí?

Me cuesta catalogarlo en una determinada categoría de libros, pero podría incluirse en:
- Maternidad.
- Humor.
- Realidad.
- Reivindicación.
- Feminismo.
- Autoayuda.
- Comunidad.
- Diario.
- Consejos maternales.

No. No puedo enmarcar el libro en ninguna categoría porque la realidad es que su autora ha escrito un libro maternal sin ser un manual de maternidad de los miles que hay.

No.

Pero habla de la maternidad, su maternidad propia, con sus vivencias personales (en algunos capítulos hay que abrazarla y llorar por la sincronía).

Mónica de la Fuente, acá fundadora de Madresfera, periodista, emprendedora, autónoma y madre de dos criaturas, afincada en Madrid, nos cuenta en este libro, escrito con una sintaxis fluida y cargado de humor, la realidad vs la idea de maternidad con la que nos encontramos en el momento en el que nos quedamos embarazadas y vamos a comprar nuestra prueba de embarazo a la farmacia hasta llegar a la pre-adolescencia. Es un libro escrito partiendo de la realidad personal de la autora, lleno de sentimientos compartidos por muchas mamás recientes y las que fuimos mamás y nos pilló de lleno.

A lo largo de los 44 capítulos, podemos disfrutar de la magia con la que en cada uno de ellos nos plantea de forma estructurada, esa expectativa que existe con respecto a temas maternales, la realidad con la que ella se encontró - contada con muchísimo humor - y terminando con una reflexión personal partiendo siempre del respeto total a cada uno de los estilos de crianza que nos podemos encontrar hoy día.

Mónica nos relata con sinceridad y realidad aquellos momentos maternales por los que toda mamá o futura mamá pasa. Leyéndola he recordado mucho esos primeros momentos con mi hijo mayor, ¡qué perdida estaba yo también!

Algo que me ha gustado mucho son todas esas referencias a blogs, libros, podcast, personas... que componen la comunidad de la que también formo parte y que ha conseguido dar voz a muchos temas.

También he tenido la sensación al leerlo de que te lo está contando con un café delante o que lo estás escuchando en un podcast.


Me quedo con la idea que transmite:

la tribu, el humor, el respeto a las distintas crianzas,

los niños/as son personas y abrazar el caos.


Tenéis que leerlo. De verdad de la buena.

7 de mayo de 2022

Nos gustan tus zapatos de mariposas

No tengo nada nuevo que contar ni tampoco estoy con los ánimos por las nubes. Pero como es mi blog, y aquí escribo lo que pienso, siento y necesito soltar, pues lo hago. 

El viernes en clase lloré, los niños no se dieron cuenta porque me di la vuelta, pero me notaron distinta (oí a una decir "vamos a decirle a la seño que nos gustan sus zapatos de mariposas"); por lo que algo notaron. 
Aunque este curso estoy cerca de casa, se me está haciendo eterno. 
Al igual que el curso pasado se pasó volando, este parece que va a cámara lenta desde diciembre. Al menos para mí. 
Después de pasar el Covid por casa, de reventar físicamente la cintura con lumbalgia, buscar ayuda en la osteopatía... me he dado cuenta de que aún sigo ahí. Y digo aún, porque de momento, con achaques, sigo. Y sigo porque me gusta mi trabajo, aunque se diferencie en mil cosas de lo que podía hacer el curso pasado, pero ahí sigo. Con las miras puestas en el día 30 de junio a las 14:00 de la tarde, donde pueda decir adiós a una etapa un tanto extraña, solitaria y desgastadora en tantos niveles. Este curso no es que lleve muchas cosas para adelante, no. No es eso. Es la dificultad de no poder cambiar ciertos aspectos educativos porque "la norma" así lo exige. Y quienes hacen esas normas o protocolos, o sencillamente esos patrones que las maestras de a pie sabemos que no sirven... sinceramente, deberían pasar no una semana, sino solo 5 horas seguidas en mi aula (o en la de tres años, que también tiene "miga"). Es muy fácil orientar y decidir desde fuera (para todo en la vida, no solo para el ámbito educativo) pero muy difícil escuchar a quien te cuenta la realidad. Y la realidad de mi aula es cuanto menos desoladora... Un aula de la que me llegaron a decir "está maldita" "la peor clase del cole"... y bueno, sé que llegar la última, provisional y demás es lo que tiene... te dan lo que no quiere nadie, y no juzgo, cada cual sabe cómo debe, quiere o puede hacer las cosas, pero creo que para asignar a un docente a un aula con las características que tiene la mía, qué mínimo saber si a esa persona se la ha preparado mental y en este caso, físicamente también, para asumir la responsabilidad, además de tener la formación específica en el trastorno del espectro autista o haber tenido experiencia en esa parcela educativa. Pero bueno, DE TODO se aprende. Y este curso para mí está siendo de APRENDIZAJE. Qué distinto es cuando tienes la posibilidad de pedir algo para mejorar, qué diferencia es sentirse respaldado en un centro... qué diferencia supone trabajar en cooperación y en equipo... Y claro, una que venía de un colegio en cuyo claustro final solo hubo palabras de agradecimiento de unos a otros... pues darse con un muro de individualidad no es mi estilo. Creo que los colegios son como los grupos de amigos, pueden ser grandes y existir el buen rollo o pueden ser pequeños y no tener tanto feeling. El caso es que, ya para ir terminando este monólogo sin pies ni cabeza (porque no se puede contar todo, al menos no todo lo que me gustaría de momento...) solo quedan 7 semanas con este grupo, que además acaba etapa y pasa a primero y 8 para estar de vacaciones.  8 semanas... 



19 de marzo de 2022

Oposiciones docentes ¿Todavía quedan 3 meses? o ¿Sólo quedan 3 meses?


Hoy es día 19 de marzo. 
El 19 de junio de 2022 será el primer examen 
del proceso de Oposiciones al cuerpo de Maestros. 
Quedan 3 meses.

¿Todavía quedan 3 meses? O bien ¿sólo quedan 3 meses?


Es importante tener una actitud de ver el vaso siempre medio lleno, me costó mucho pensar que era capaz, que debía atraer la suerte, me veía a tres meses del examen con el vaso medio lleno, pensaba que no recordaba nada, que había perdido el tiempo, que sólo quedaban tres meses. Escribía mis pensamientos, encerrada en la biblioteca, en alguna de las libretas que tenía. 9 días antes del examen pensaba que iba a ser un desastre. Las 450 plazas que salieron me parecieron pocas, la cantidad de interinos que había en mi tribunal, las dificultades para dejar mi casa e irme a la biblioteca, la cantidad de horas que pasaba sentada delante de los temas y los supuestos prácticos, los viernes de 5 a 9 en la academia después de toda la semana trabajando…
Y el propio trabajo personal, ya que puedes tener la mejor formación, el mejor preparador o preparadora pero si no te matas a estudiar… se convierte en algo complicado de alcanzar.

Al final, todo suma. Las pequeñas acciones son las que van completando la formación.

Es momento de sentarse, saber elegir, centrarse, concentrarse, delegar lo que sí puedas delegar, apagar el móvil, dejar las redes sociales y decirte a ti mismo/a
“UNA PLAZA ES MÍA” y en el caso de algunas “UNA BATA DE MAESTRA TAMBIÉN ES MÍA” ♥️



Mucho ánimo a todas esas maestras/os, madres/padres, compis… y mucho más a ese grupo tan bonito que veo los jueves

#opomami #opomamicé #opositorasfueradeserie #opos #oposicionesmaestros2022 #docente #claustrodeiginfantil #claustrovirtual #soymaestra

13 de marzo de 2022

Apaga el móvil si estás con tus hijos e hijas

El viernes tuve el placer de participar como invitada en el programa de InternetdetuColorFavorito ahí os dejo el enlace por si queréis verlo. 
Me preguntaron sobre qué podría decir si de repente todos los padres y madres pudieran escucharme, y una de las cosas que dije, entre otras, era que facilitasen la autonomía de los niños y niñas, que practicasen la escucha activa y para ello, apaguen un rato el móvil. Apagar el móvil es algo que suelo hacer cuando estamos todos en casa y no hay posibilidad de urgencia, y si la hay, está el teléfono fijo de casa al que pueden llamar. 

Vivimos en el mundo de las prisas, de las redes sociales, de la inercia social que nos empuja a conectar momentos, actividades, situaciones... de forma que el "tiempo libre" se nos queda reducido de tal manera que miramos hacia atrás y de repente vemos a nuestros hijos muy mayores... 
Como madre de un hijo preadolescente puedo decir que es un niño muy hablador, pero hay cosas de las que no hablamos (porque sé que quiere esa parcela de no tener que contarle algunas cosas a mamá) pero sí hay otras muchas que me cuenta. Le presto atención y es increíble cómo con 12 años tiene pensamientos muy claros. 
Un amigo suyo que estuvo en casa se sorprendió cuando me vio jugando con él a un juego del ordenador (maravilloso Age of Empires II) al que jugué mucho en mi juventud (no es que sea una madre gamer ni mucho menos, pero me gustan los videojuegos y no juego más porque no me da la vida ya sabéis) porque según él su madre no jugaría nunca. Pues a mí me gusta compartir al menos algunos intereses con él. Hablamos del juego, de estrategias, si sabes cómo hacer tal o cual cosa. Compartir al menos un interés hacer que también quiera compartir otras sensaciones en otros ámbitos. No quiero que me lo cuente absolutamente todo, pero al menos creo (y de vez en cuando se lo repito) que sabe que si en algún momento me tiene que contar algo que le preocupe lo hará (o eso espero jejeje).
Quería hacer una entrada breve pero al final me he puesto a escribir... 



Y vosotros, ¿apagáis alguna vez el móvil? ¿practicáis la escucha activa
Si quieres saber más sobre escucha activa, Elvira del Blog Atención selectiva os lo explica muy bien aquí , así que pasad por su blog y encontraréis mucha información al respecto. 
    

12 de febrero de 2022

A mis 39

El lunes día 14 cumplo años, concretamente 39. 
TREINTAYNUEVE. 
No es la primera vez que os cuento que NO me gusta cumplir años. Sí, ya, ya... lo bueno es cumplir, etc. Que sí, pero... me pongo "mu tonta" en ese día y es raro que no llore... 

Mi último cumpleaños fue de llorar total, porque, 3 días después operaban a mi pequeña del corazón y recuerdo ese cumpleaños muy bonito pero con el corazón "encogío".  


Este año ella está emocionada y quiere celebrar una fiesta sorpresa (es que se le da mal guardar secretillos jeje) y me ha preparado un regalo casero también (me encanta cuando me regala cosas que le gustan a ella pero que quiere que tenga yo). 
Para este cumple he pensado en llevarlos al cine, que yo ya ni recuerdo cuándo fue la última vez que fuimos todos juntos. 

A mis 39 podría decirse que he alcanzado algunas de las "expectativas" o "logros" o "aspiraciones" a las que no sabía hace unos años si llegaría. Hoy puedo decir  que dentro de todas las dificultades... oye, ni tan mal. Tengo un trabajo que me gusta (aunque este año esté siendo muy difícil), estoy ayudando (creo) a otras personas a conseguir trabajar de lo que les gusta. Tengo a mi familia sana (que vaya 2021 más difícil en muchos aspectos), y también tengo muchas ideas nuevas en mente. 
No sé si este año conseguiré destino definitivo, aún así, éste será en otra provincia, por lo que no será el sitio al que me incorpore como definitiva. A veces pienso en ese momento en el que ya sepa dónde voy a estar más de un curso seguido y me emociona, mucho; porque eso de ir dando tumbos no está mal porque aprendes mucho, pero las mudanzas de material docente son criminales... 
A mis 39 también he aprendido (quizá a base de "malosratos") que la tranquilidad y paz mental está infravalorada,  la felicidad no debe estar en lucha constante con lo que debo o no debo hacer. 
A mis 39 también creo importante desanclar el pasado y seguir hacia delante, solo tenemos UNA vida... y debe ser para vivirla y disfrutarla. Poco a poco hago cosas que tienen detrás decisiones (viajar sola a Madrid, probar con Lookiero, ser preparadora, darme caprichos de vez en cuando...) que quizá hace unos años ni me habría planteado. 
A mis 39 también sé que la vida vuela y que, aunque ahora no tenga mucho tiempo de leer tranquila los 200 libros que tengo pendientes o usar mi máquina de coser, o dibujar, escribir mi libro... sé que llegará un momento en el que todo eso podrá hacerse. 
A mis 39 creo que he alcanzado ciertas metas vitales importantes para mí (al menos según mi forma de verlo) y eso da mucha estabilidad, el equilibrio hay que buscarlo poco a poco y saber que, en algún momento, ese equilibrio llega, pero tampoco hay que tener miedo a que ese equilibrio se rompa o no llegue. Todo pasa y todo llega. 
Y bueno, después de muchos días sin actualizar el blog (por falta de tiempo principalmente y también porque no sabía qué podía contaros...) esta es la primera entrada de este 2022. 
Si queréis saber más de mí, tenéis instagram y twitter.

Sed felices. 




31 de diciembre de 2021

Mi 2021 bloguero

Un año más que ha pasado, un año más... y van unos cuantos.

Releyendo mi 2020 bloguero, me he fijado en los propósitos de año nuevo con el blog, uno de ellos era escribir más post de opinión y educación... pero solo he escrito 6, que pueden ser muchos o no, pero la realidad es que no he dado para más. Otro de los propósitos era darle una nueva cara al blog... pero tampoco, sigue prácticamente igual que hace un año. 

Y llegamos al tercer propósito que era llegar a la final de los premios Madresfera... ¡conseguido! y además... ¡ganar el premio! Aunque aún no me ha llegado la ansiada estatuilla, que en estos tiempos es lo normal, podéis ver aquí mi cara de lacia cuando recibí el premio en la Gala en directo.

La realidad es que no me lo esperaba, podéis escuchar la entrevista y conocer a otros ganadores y ganadoras de esta edición. Ha sido una gran sorpresa y un subidón para el blog. 
En cuanto a contenido generado en el Blog este año ha sido el que menos entradas he realizado, sin embargo, a mí me parece que han sido entradas de más calidad.  Ahora hay que seguir avanzando, crear contenido, dedicar tiempo a generar ese contenido para que sea de calidad. 




Y acabar el año en esta posición del ranking... ¡está muy requetebién!




A nivel personal y laboral este 2021 ha sido un vaivén de emociones, buenas y no tan buenas. He conocido gente nueva pero también me he alejado de aquellas personas que ya no aportan nada en mi vida, aunque sean personas que parecía que siempre estaban ahí, pero la realidad es que, después de la operación de mi hija, me he dado cuenta de la gente que realmente se interesa por mí y la que me ignora y hace como si el problema fueses tú. 
Hay personas que no recuerdan cuando estuvieron mal y estuve con ellas, y eso después de tanto tiempo duele mucho. A esas personas que ya no están en mi vida les deseo lo mejor pero ya no me apetece hacer nada por mantener amistades "moribundas" que solo quieren saber tus penas o contarte las suyas sin escucharte. Esas personas, lejos. Lo que no aporta que se aparte. Y sí que hay personas que aportan, entre ellas personas que llegan a tu vida para ayudarte y personas que parece que no están pero la realidad es que sí, esas que tienen un ratito para preguntarte cómo estás, que un simple mensaje de ánimo te llega en el momento más adecuado. Esas son las personas que quiero en mi 2022. 
2022 es un año que llega con un inicio de incertidumbre... por desgracia el virus sigue estando presente y a nivel emocional es un desgaste muy grande. 
Este 2022 para el blog solo voy a pensar en un propósito: que lo que escriba me haga feliz y compartir y transmitir a quienes me lean esa felicidad. No pido más. 
Quiero agradecer a todas las personas que me leen y que siguen con cariño las cuentas de Twitter e Instagram, a veces he sentido más cerca a personas que viven a cientos de km que las que están a dos pasos...






24 de diciembre de 2021

El valor de la vocación

Hace varios días que vengo rumiando varios temas, entre ellos, el valor de la vocación. 

Según el diccionario en su segunda acepción, vocación es: "inclinación o interés que una persona siente en su interior para dedicarse a una determinada forma de vida o un determinado trabajo".  

Ya os conté aquí que este curso estoy con un grupo de alumnos/as de cinco años muy complicado. En el aula hay tres alumnos con TEA integrados, atendidos en algunas sesiones por pedagogía terapéutica y por audición y lenguaje y también por ptis (personal técnico en integración social) y educadora. En mayor medida están en el aula conmigo. Además, tengo 16 alumnos/as más, los cuales tienen también necesidades que atender. Este curso ha tenido desde 3 años, varias maestras distintas, personas que han intentado "sobrevivir" a la situación de manera desbordada. A veces mi aula parece una casa de locos: juguetes por el suelo, pegamentos abiertos, plastilina mordisqueada... El caso es que he visto una evolución en ellos. Cuando llegué el día 27 de septiembre, llevaban las clases empezadas varios días, por lo que me metí de lleno en el aula. Recuerdo el primer día cuando analicé la situación y me dije: no puede ser que esto esté así. 
Los niños/as no me conocían, habían estado con 7 maestras distintas, además de todos los cambios entre que cubrían una baja y otra... caos total. Y me abracé a ese caos. 
He tenido la ayuda maravillosa de mi práctica MECO (Mediadora en comunicación social) y todo ha sido mucho más llevadero, que no fácil. 

En este primer trimestre he tenido que flexibilizar al máximo mi programación y mi forma de trabajo habitual, cambiar el chip, cambiar mi idea y concepto de la educación. Pero también darme cuenta de que, aunque sea difícil y a veces frustrante para mí, estos niños/as necesitaban a alguien "que no  se fuera". Y fijaos lo que os digo, mi pensamiento si me hubiera tocado la lotería NO era decir "venga, hasta luego maricarmen", sino ayudar a que esta clase crezca y pagar los medios necesarios (profesores sombra) para poder conseguirlo, además de cambiar el mobiliario y materiales para mejorar algunos aspectos. 

Pero la suerte en forma de lotería no ha llegado, jeje. Acaba un trimestre y comenzaremos, espero, en enero con energías recuperadas. 

Hay mucha gente con vocación que no está en las aulas. Y al revés también (aunque no son tantos). El caso es que, si vas a trabajar con un material tan "delicado" como lo son los niños y niñas de infantil, lleva siempre contigo la vocación por tu profesión. 

Esta noche es nochebuena, aunque en Málaga se la va a pasar lloviendo, os deseo una feliz navidad en negativo, que ya he visto y sentido muchos positivos que van a tener que pasar unas fiestas sin familias encerrados o con la familia pero sin poder estar cerca. 
Cuidaos mucho. 

FELIZ NAVIDAD 2021

                                             



26 de noviembre de 2021

Viajar sola a Madrid

 Llevo unas semanas muy completas. 
Estuve en Madrid para realizar la carrera Profuturo, una experiencia sin duda, muy distinta y nueva, en muchos sentidos.

Yo que pensaba que no iba a acabar la carrera entera, que iba a abandonar, que iba a asfixiarme o que me iba a recoger la ambulancia... pero.. en 52 minutos la hice. Ya lo sé, no es que llegara de las primeras, pero llegué y eso hizo que me diera cuenta de muchas cosas.

Viajar sola. Es la primera vez que viajo completamente sola y aunque en el momento de sentarme en el AVE me entró un poco de pánico... me calmé y dije "esto es bueno para ti", y aunque tuve un compañero de viaje un tanto imbécil (lo conté en Twitter), llegué allí, con tanta gente en la estación... sabía que tenía que coger un taxi, pero no sabía exactamente dónde estaba la pensión en la que me quedaba y de noche, era todo un poco más complicado. Lo rápido, llamar a la pensión y que me indicaran. 






Una de las librerías más bonitas que conozco









Desvirtualizar a la gente con la que llevas hablando mucho tiempo mola un montón y si además te enseña sitios chulos porque los conoce, ¡mucho mejor! Un ratito muy a gusto. 







Antes de la carrera


Una parada obligada en Starbucks

¡Ciao, Madrid!

Más adelante os contaré sobre un premio muy importante para este blog.

¡Gracias por leerme!



1 de noviembre de 2021

Implícate

La implicación

Hoy dedico un pequeño tramo de mi tiempo (limitado, ya sabéis... igual empiezo a escribir, surge algo y debo dejarlo en borrador un tiempo) a hablar sobre este tema que me está tocando, desde hace un par de meses, muy de cerca. 

Si nos vamos a la definición que nos plantea la RAE, podemos leer lo siguiente:

1. tr. Hacer que alguien se vea enredado o comprometido en un asunto. Intentan implicarme a  para salvarse ellos. Hay varias personas implicadas EN la estafa.

2. tr. Hacer que alguien o algo participe o se interese en un asuntoLa protesta ha conseguido implicar a todos los sectores sociales.

3. tr. Llevar consigo o significar algoUna afirmación que implica su propia negación es una paradoja.

4. tr. p. us. Impedir algoU. m. con neg.

5. prnl. Adquirir el compromiso de participar en algoNo quiere implicarse EN el proyecto.

Quiero que nos centremos en dos de ellas, la número 2 y la número 5.

Desde mi actual situación, en el trabajo y preparando las opos, me veo con esas dos definiciones a diario. Mi cometido, mi compromiso, entendiéndolo así, viene en primer lugar con la definición nº 2. Debo y quiero hacer que alguien (mis alumnos/as, las familias, mis niñas de las opos,...) se interesen en un asunto. Viéndolo desde esta perspectiva puedo pensar que, si no se da la definición del punto 5, es que no estoy haciendo bien mi trabajo. Re-formulo. ¿Qué es lo que estoy haciendo entonces?

Sería un tanto altiva si no pensara que lo primero debe preceder a lo segundo, pero en este caso, la implicación no puede depender de que alguien nos lleve a interesarnos por algo. Sé que me explico como un libro entreabierto, lo sé, soy consciente, pero de lo que vengo aquí a hablar es de que, quien algo quiere, algo le cuesta, que quien la sigue la consigue y que los milagros a Lourdes. 

A lo mejor (quizá, no lo sé) la motivación lleve a la implicación. Por poner un ejemplo, os diré que en casi todas mis clases de oposiciones llevo algún detalle para "sortear" entre ellas (una libreta, un pack de fichas para realizar notas, bolígrafos, etc). Creo que es una forma muy simple y sencilla de "motivar" para que acudan a clase. 

Luego veo la implicación y la no implicación. Por lo que, probablemente, si dejo de hacer sorteos, la implicación ¿bajará o se mantendrá igual? Lo que sí sé es quien muestra interés y por tanto, implicación en todo lo que hace, y eso es algo que no va a un saco roto, sino que al final, acaba rebosando y contagiando de implicación a los demás. 

En el trabajo me he encontrado lo mismo. La cantidad de maestras que han pasado en dos cursos por mi grupo de cinco años ha sido, en su mayoría, (no todas) personas con cero implicación. La implicación conlleva esfuerzos (de todo tipo) y si no nos esforzamos, difícilmente nos vamos a implicar, y quien no se implica, no gana, no recoge frutos y mucho menos se saca una plaza. 

En una escala del 1 al 10
¿cuánto os implicáis en vuestro trabajo?
¿cuántas horas dedicáis a la semana a vuestro sueño? 
¿implicar significa realizar esfuerzos y sacrificios? 
¿estás transmitiendo implicación a los que te rodean? 
Y ahí os dejo esta reflexión que lleva días en mi cabeza (aparte de otros pensamientos también, claro está). 


Implícate



¡Ganadora!

Premio Saboresfera 2020

Lista de cosas necesarias para ir de camping [con niños pequeños]

Aviso que va a ser un post bastante largo...          Cuando éramos pequeñas mi madre y mi padre nos dieron uno de los mayores regalos q...

Soy finalista por 3ª vez

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