Hay algo que tenéis que saber de mí si es que aún no lo sabéis. Me encanta aprender cosas nuevas. Me encanta la formación y el aprendizaje, y si tienen que ver con actividades que me apasionan pues mucho mejor.
El caso es que en ocasiones veo cursos... y me apunto. Marido está ya un poco cansado de que tenga ese ánimo formativo (tengo horas de sobra para el concurso de traslados) y sé que cada vez que le hablo de un curso nuevo se echa a temblar.
Ya os hablé de los cursos que he realizado sobre escritura creativa (he hecho tres) y sobre bibliotecas y también sobre blogger. En todos ellos he aprendido algo que uso en mi vida cotidiana y para mí, no han sido horas perdidas. Puede que algún día esté más receptiva que otros pero siempre es una formación provechosa.
El último curso que he realizado y que han sido varias tardes de jueves online, se llama Podcast y Literatura infantil. Este curso surgió de un proyecto que nació en pleno confinamiento: Podcast y a dormir. Fueron muchos los maestros y maestras que en ese momento de confinamiento allá por los meses de marzo, abril y mayo se aclararon las gargantas y empezaron a adentrarse en el mundo de la narración de cuentos a través de los podcast. Yo me quedé con las ganas, pero me habría gustado formar parte de aquel movimiento tan atrayente.
El caso es que en septiembre lanzaron las propuestas formativas del CEP de Marbella y allá que me apunté al curso. De él me llevo un montón de libros nuevos que no conocía y que van de cabeza a la carta de Reyes Magos familiar.
Mi situación en casa, ya que vivimos en un piso pequeño, no se presta al silencio ambiental para grabar podcast. Aunque tengo mi micrófono y se escucha bien, tengo que aprovechar los huecos para poder grabar. Aquí os dejo lo último que he grabado, espero que os guste. Os animo a seguir la cuenta de Podcast y a dormir y que nunca dejéis de contar cuentos.